La resistencia aumenta a medida que aumenta el número de vueltas y el grosor del hilo.
También existen resistencias construidas con un patrón en espiral de película de carbono. Las resistencias de película de carbono deben su nombre a esto. Las resistencias de película de carbono no son tan exactas como sus competidoras de hilo, por lo que son mejores para circuitos de baja potencia. No obstante, son menos caras que las resistencias conectadas. Los dos extremos del cable están conectados con terminales de cable. La electricidad puede fluir en cualquier dirección a través de las resistencias, ya que son ciegas a la polaridad en un circuito. En consecuencia, no hay que preocuparse de si están conectadas hacia delante o hacia atrás.
¿Qué es y cómo funciona?
Una resistencia puede parecer insignificante, ya que no hace más que devorar energía. Sin embargo, cumple una función importante: regula el voltaje y la corriente del circuito. Los resistores, en otras palabras, le permiten controlar el trazado de su circuito. Cuando se aplica una corriente eléctrica a un cable, todos los electrones comienzan a moverse en la misma dirección.

Es lo mismo que el agua que corre por una tubería. Como hay menos espacio para que el agua pase por una tubería delgada, fluirá menos agua por ella. Cuando la corriente viaja a través de un cable pequeño en una resistencia, a los electrones les resulta cada vez más difícil moverse a través de él. En otras palabras, a medida que aumenta la longitud y el grosor del cable, disminuye la cantidad de electrones que circulan por la resistencia.